El déficit de plantillas en el SERMAS no se soluciona con el parche de la Consejería
La numerosa concentración a las puertas del Hospital General Universitario Gregorio Marañón, dentro del calendario de movilizaciones convocadas por los cinco sindicatos con representación en la Mesa Sectorial de Sanidad de la Comunidad de Madrid, ha dejado en evidencia que los parches de la Consejería no solucionan el problema del déficit estructural de personal en los centros.
Los reiterados anuncios por parte de la Consejería durante estos dos últimos años se han materializado en promesas vacías de contenidos y medias verdades que crispan a profesionales y usuarios de la sanidad. Pero los datos no mienten: Madrid es la comunidad que menos porcentaje del PIB invierte en Sanidad, únicamente el 3,57%, mientras que la media de inversión del resto de Comunidades Autónomas es del 6%. No en vano, el borrador de presupuestos autonómicos para 2022 no prevé destinar ni tan siquiera la partida económica que la propia Comunidad de Madrid gastó en la sanidad durante 2019, el año previo a la pandemia. ¿Es así como el gobierno regional pretende reparar una estructura sanitaria tan denostada?
Esta infrafinanciación que el gobierno autonómico viene aplicando de forma reiterada, año tras año, es la razón por la que la estructura sanitaria de nuestra región ha ido debilitándose desde mucho antes de la pandemia. Por eso, el anuncio de la Consejería de renovar durante tres meses más los contratos de refuerzo Covid es, más que una solución al problema, un parche temporal para intentar desactivar el calendario de movilizaciones que tenemos programado los sindicatos con representación en la Mesa de Sanidad.
La reclamación de estabilización de contratos que el gobierno regional prefiere obviar, en vez de atajarlo de raíz, responde a una necesidad estructural que venía desde antes de la crisis COVID, provocando una sobrecarga de trabajo que, añadida a la fatiga pandémica, ha derivado en una mayor fuga de personal a otras comunidades o al extranjero, por las malas condiciones laborales que la Comunidad de Madrid ofrece.
A la protesta convocada por CSIT UNIÓN PROFESIONAL, CCOO, AMYTS, SATSE y UGT, a las puertas del centro hospitalario, se ha unido un amplio número de profesionales de diversas categorías para reivindicar a la Comunidad de Madrid una mayor inversión presupuestaria en la sanidad pública madrileña que requiere de forma inmediata un incremento de profesionales en las plantillas estructurales para rebajar esa sobrecarga de trabajo y hacer que el Servicio Madrileño de Salud de la Comunidad de Madrid sea un destino laboral atractivo para los profesionales sanitarios.
