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Consejos para los días previos a los exámenes:

• Descanso. Es recomendable llegar al examen lo más descansado posible. Dormir, aproximadamente, ocho horas antes del examen facilita afrontar en mejores condiciones las pruebas. El descanso te ayudará a controlar el estado de ansiedad en los instantes previos al examen.
• Naturalidad. Hay que educar la mente para que el día del examen sea interpretado como un día más de nuestra vida; un día especial sin duda, por lo que está en juego, pero un día más. Si afrontamos el examen con naturalidad, todo será más fácil.
• Repasos finales. Realiza un repaso final global de todo el temario sin intentar aprender más contenidos nuevos en los días previos al examen. Es mejor llevar una parte del temario muy bien aprendida y otra que no dominemos a llevar todo el temario aprendido “por encima”.
• Familiarizarse con el lugar. Ayuda conocer el lugar donde te vas a examinar. Debes llegar, aproximadamente, 30 minutos antes de la hora convocada y familiarizarte con el escenario. Esto permitirá a tu cerebro sentirse cómodo y concentrarse en lo que realmente importa. 
• Documentación. Debes dejar preparado la víspera y en un lugar que sepas que no se te va a olvidar, el DNI, el resguardo de la instancia y aquellos útiles que te sean necesarios para el examen: bolis, botella de agua, etc.
• Acompañamiento el día del examen. Debes acudir acompañado por personas que te transmitan tranquilidad y que no intensifiquen los nervios.

Trucos para afrontar con éxito el examen:

• Atiende a las instrucciones del responsable del aula y pregunta si tienes alguna duda. 
• Revisa bien las instrucciones del examen y la forma de responder, rectificar o anular cada pregunta.
• Debes leer detenidamente cada pregunta y, una vez entendida, pasar a leer todas las respuestas; no pares la lectura cuando creas haber encontrado la respuesta correcta; puede ocurrir que otra sea también correcta pero más completa y, por tanto, la opción a señalar.
• Responde con agilidad; no te detengas mucho tiempo en las preguntas que no tengas claro la respuesta correcta. Debes contestar primero las preguntas que sabes con seguridad y dejar para un repaso las que te planteen dudas.
• Nunca cambies una respuesta ya elegida si no estás completamente seguro del cambio de elección. Hay estudios que demuestran que la primera respuesta elegida suele ser la buena. Y si te genera muchas dudas, anúlala. Es mejor no responder que responder erróneamente y que te resten puntuación.
• Ten cuidado con las alternativas “todas las anteriores” o “ninguna de las anteriores”, pues son muy inclusivas y para que sean ciertas hay que ir confirmando o anulando respectivamente todas las anteriores.
• Atiende especialmente a la utilización en el enunciado de las expresiones “todos/as”, “nunca”, “siempre”, “algunos/as”, “si”, “no”, pues son determinantes en el significado de la pregunta.
• Recuerda que las preguntas del caso práctico van siempre referidas al enunciado, aunque parezcan preguntas genéricas.
• Ten mucho cuidado cuando rellenes la hoja de respuestas y antes de entregar el examen comprueba que no te has saltado ninguna y que concuerda con la respuesta que querías anotar.

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