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Nuevas inundaciones en el HGUG: EL MAL ESTADO DE LAS INFRAESTRUCTURAS DEL HOSPITAL PONE EN RIESGO LA INTEGRIDAD FÍSICA DE PACIENTES Y PROFESIONALES

La Sección Sindical de CSIT UNIÓN PROFESIONAL en el Hospital General Universitario Gregorio Marañón denuncia, una vez más, el mal estado en el que se encuentran las instalaciones del Centro desde hace varios años.


En esta ocasión, durante la noche del jueves 24 de mayo al viernes 25, y como consecuencia de las lluvias acaecidas durante estos últimos días, la farmacia del Hospital era el área más afectada: inundada y con numerosas goteras en varios puntos de la Unidad, a lo que hay que añadir el desprendimiento de parte del techo, suceso ocurrido días anteriores. En vista del peligro de la situación, los trabajadores han solicitado que se garantice su seguridad antes de iniciar su actividad laboral. Sin embargo, la Dirección de Enfermería, a la espera de un nuevo informe técnico si prosiguen las precipitaciones, les ha obligado a reanudar sus cometidos diarios, asegurando que no existe riesgo para su integridad, aunque sin ofrecer garantía alguna.

 

Los Delegados de Prevención de Riesgos Laborales designados por CSIT UNIÓN PROFESIONAL, tras revisar las instalaciones afectadas, remitieron un escrito informando de la situación al Gerente del Hospital, al Presidente del Comité de Seguridad y Salud, al Jefe Servicio de Prevención, al Director de Enfermería y a la Directora de Gestión. “Hacemos responsable a la Dirección del Hospital de cualquier incidente que pudiera ocurrir, ya que se ha obligado a los trabajadores a realizar su actividad bajo estas condiciones”, concluía el comunicado. Por su parte, a comienzos de esta semana, la Directora de Gestión aseguraba que el problema ya estaba solucionado, pero desde CSIT UNIÓN PROFESIONAL, al confirmar que esto no era así, hemos reclamado a la Gerencia que informe al Comité de Empresa sobre las medidas que van a adoptar al respecto. Asimismo, advertimos a la Dirección del Centro de la urgente necesidad de acometer las rehabilitaciones pertinentes, a fin de evitar que las infraestructuras actuales queden inservibles en el caso de que las condiciones climatológicas persistan con la misma e incluso mayor intensidad.

 

El grave deterioro que acusan muchos de los pabellones de este Hospital provoca que, de manera reiterada durante todo el año, se produzcan goteras, filtraciones, grandes charcos en los suelos e, incluso, la caída de falsos techos de escayola y láminas decorativas de fachadas. Estos hechos no sólo han originado el cierre e interrupción de algunos de los servicios que ofrece el centro, sino que, además, algunos trabajadores se han visto afectados directamente. Las instalaciones están tan deterioradas y obsoletas que corren el riesgo de resultar totalmente impracticables para su uso, de continuar soportando lluvias torrenciales como las de estos últimos días sin ningún sistema de protección. Puesto que está en juego la seguridad de las personas, desde CSIT UNIÓN PROFESIONAL exigimos que las obras de remodelación y adecuación, incluidas en el Plan de Infraestructuras, se lleven a cabo con la máxima celeridad posible, en aras de que no se hayan de lamentar incidentes de mayor envergadura.

 


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