CSIT UNIÓN PROFESIONAL exige nuevamente a la Gerencia del Hospital del Tajo que dote de recursos humanos, materiales y formación para ofrecer seguridad y calidad en la asistencia sanitaria
En plena tercera ola de COVID-19, desde la Sección Sindical de CSIT UNIÓN PROFESIONAL en el Hospital del Tajo denunciamos, una vez más, la inacción de la Gerencia del centro ante los múltiples problemas a los que se enfrentan sus profesionales desde hace años.
A pesar de los escritos remitidos por esta Organización Sindical desde hace meses, y la situación epidemiológica actual del Hospital, consecuencia del incremento de ingresos de pacientes COVID (tanto en urgencias, como en la UCI y plantas de hospitalización), los gestores del centro continúan sin atender nuestras peticiones, mostrando caso omiso a mejorar la calidad asistencial ofrecida a los ciudadanos, estableciendo una mayor participación de los trabajadores en la toma de decisiones, entre otros.
Las peticiones realizadas por CSIT UNIÓN PROFESIONAL a la Gerencia, reclamando la urgente necesidad de ampliar las plantillas de Enfermería (DUES Y TCAES), personal de Limpieza, TIGAs (para el Transporte Interno y Gestión Auxiliar) y personal de Seguridad, totalmente deficitarias, y estando sumergidos en la tercera ola del coronavirus, siguen siendo ignoradas, revirtiendo esta situación de manera directa sobre los pacientes y resto de trabajadores sanitarios. A día de hoy, a pesar de la profesionalidad y esfuerzo de los trabajadores en su conjunto, la situación en el Hospital es límite: dos plantas COVID, UCI con 12 camas COVID y una urgencia repleta de pacientes con diferentes patologías. Además, aunque se ha producido un incremento de las incidencias acumuladas por COVID-19, NO existe control alguno de entrada de pacientes, acompañantes o familiares en el centro.
Se están viviendo momentos de mucha tensión, debido a la escasez de personal en lugares donde, por ejemplo, se requiere realizar una pronación, un cambio postural o una intubación, así como por la falta total de limpieza (solo existe una única presencia de personal de limpieza en el turno de noche. En el resto de turnos, las plantillas son escasas). Estas circunstancias ponen en riesgo la salud de pacientes y profesionales, además de un retraso a la hora de agilizar altas e ingresos.
Asimismo, subrayamos que los problemas, anteriormente denunciados, relacionados con las instalaciones e infraestructuras del Hospital, continúan sin ser atendidos:
- Instalación de lavabos en distintas áreas del Hospital para los profesionales en sus puestos de trabajo, indispensable en una situación de Pandemia, con la importancia que tiene el lavado de manos.
- El Servicio de Urgencia y el Área de Pediatría no cuentan con espacio suficiente para poder trabajar en condiciones de seguridad. Del mismo modo, la sala de espera de Traumatología no posee dotación de tomas de oxígeno, iluminación, baño…
- Cuñeros rotos en la zona de observación del Servicio de Urgencias.
- La nueva sala habilitada para llevar a cabo las espirometrías no cumple las condiciones de salud y seguridad que se requieren.
- La apertura batiente de las ventanas de hospitalización, ante la necesidad de compartir habitación dos pacientes con COVID.