Valor de la Atención Primaria durante la Pandemia. AP clave en el diagnóstico y seguimiento de la infección por COVID-19
La Atención Primaria madrileña, mermada desde hace años, se ha convertido en uno de los grandes problemas asistenciales del SERMAS
Desde el principio de la pandemia en CSIT UNIÓN PROFESIONAL hemos señalado la importancia de la Atención Primaria en el diagnóstico precoz y atención clínica, tanto presencial en el centro de salud, como en el domicilio de los pacientes afectados por COVID-19, evitando el colapso de la asistencia hospitalaria y contribuyendo a frenar la curva de nuevos contagios y a reducir el impacto negativo en la salud global de la comunidad.
La accesibilidad que tiene el ciudadano a este ámbito sanitario es la clave. Durante la pandemia ha sido fundamental la atención proactiva a través del seguimiento telefónico y este sistema ha demostrado que la asistencia telefónica, puede jugar un papel de apoyo muy útil de cara a futuro.
Durante la crisis del Covid-19 se han realizado desde AP el diagnóstico y seguimiento de más de 300.000 pacientes infectados, sin necesidad de asistencia en centros hospitalarios, así como la detección de los casos que sí han necesitado atención hospitalaria. Todo ello continuando a la vez, con su actividad habitual del manejo de enfermedades crónicas y agudas no COVID-19 y el seguimiento de las altas hospitalarias COVID-19.
Todo ello con una Atención Primaria con recursos mermados desde hace años, con un déficit de plantilla de un 15-20% en relación con la media de las CCAA y con el porcentaje más bajo de gasto sanitario público destinado a AP.
Desde CSIT Unión Profesional solicitamos medidas URGENTES que sean REALISTAS para poder solucionar la situación de la AP, entre las que deben estar la ampliación de la plantilla de AP, contratos de larga duración, mejora condiciones de trabajo y equiparar los salarios de la Comunidad de Madrid al resto de CCAA. La estimación de recursos para AP que la Consejería de Sanidad ha anunciado, con motivo del aumento de la actividad que repercutirá directamente sobre los centros de salud en la fase de transición de la pandemia, no se va a cumplir. Este incumplimiento es especialmente significativo en la categoría de médicos de familia y pediatría, donde no se alcanzará ni un tercio de los 335 recursos estimados.
La Atención Primaria ha sido y es un pilar fundamental de la asistencia sanitaria y su buen funcionamiento es imprescindible para garantizar el éxito de la “fase de desescalada” .